La demanda por grados en inteligencia artificial ha alcanzado un nivel que supera la oferta disponible en universidades públicas españolas. Los aspirantes necesitaban una nota media superior al 11 en la EvAU 2025 para acceder a estos programas. Este requisito sitúa los criterios de admisión en un rango que pocos candidatos pueden alcanzar. Aun así, hasta el 50% de los solicitantes se quedaron sin plaza. Esta brecha inicial marca el contexto de un sistema educativo en pleno proceso de adaptación.
El grado en ingeniería de datos e inteligencia artificial de la universidad Complutense de Madrid registró un 12,678 sobre 14 como nota de corte. Centros como la Universidad Politécnica de Madrid y la Universitat Politècnica de Catalunya cifraron sus cortes en torno al 12 sobre 14. Las universidades de Sevilla, Jaén y Alicante superaron el 11, mientras que la mayoría de los programas en León, Elche y Bilbao exigieron una nota por encima del 10. Solo la Universidad de Vigo quedó por debajo de este umbral.
Oferta limitada frente a la demanda
El total de plazas ofertadas para el curso 2025/2026 se sitúa entre 500 y 800 en toda España, muy por debajo de la demanda real. El estudio incluyó a las diez instituciones mejor posicionadas en el ranking QS España 2024 para analizar el porcentaje de programas con IA. Menos del 1% de los grados de este grupo incluyen explícitamente inteligencia artificial en el nombre. De los programas tecnológicos analizados, solo el 2,26% se centra en IA. Esta proporción agrava la dificultad para acceder a estudios especializados.
Según la fundación IndesIA, en 2024 quedaron 4.000 puestos de trabajo relacionados con IA sin cubrir en España. Esto sitúa el desajuste entre necesidades y recursos disponibles en primer plano. El proceso de aprobación de nuevos grados universitarios puede durar de dos a cuatro años, lo que retrasa la actualización de los contenidos y provoca que los planes queden obsoletos al entrar en vigor. Las universidades optan por priorizar programas de posgrado en lugar de ampliar las plazas de grado. Este enfoque reduce las oportunidades de los estudiantes que buscan iniciar sus estudios en IA.
Impacto y retos de los grados de IA
Arnau Ramió, director académico de Learning Heroes, advierte que “los procesos de aprobación de nuevos grados dificultan la ampliación de la oferta en un contexto de alta demanda”. El retraso en formalizar y revisar los planes de estudio afecta la relevancia de la formación. Sin una base sólida de grados en IA, los másteres y posgrados no pueden garantizar la preparación adecuada de los profesionales que requiere el mercado. Ramió subraya la falta de una base académica que respalde los estudios avanzados en IA. Sin esa base, los programas de posgrado corren el riesgo de quedarse limitados a contenidos teóricos.
Este desequilibrio entre oferta y demanda plantea un reto para estudiantes y mercado laboral. La escasez de plazas podría impulsar a los futuros profesionales a buscar alternativas de formación privada o cursos online. Al mismo tiempo, la falta de expertos formados en IA puede frenar proyectos de investigación y desarrollo en España. La situación evidencia la necesidad de agilizar la creación de programas de grado y revisar los procesos de aprobación para garantizar un acceso alineado con las necesidades tecnológicas. Algunos analistas proponen la creación de cursos modulares y la colaboración entre universidades y empresas para mejorar la flexibilidad educativa.