El avance de la IA generativa impulsa la demanda de plataformas de cálculo masivo en proyectos de investigación. El comité HPCI (High Performance Computing Infrastructure), iniciativa nacional japonesa para coordinar y financiar las principales instalaciones de supercomputación del país, subraya la importancia de la IA para la ciencia. El programa da prioridad a infraestructuras que puedan adaptarse a demandas cambiantes. RIKEN lidera el desarrollo de la nueva plataforma, con Fujitsu a cargo del diseño global y la CPU. El Ministerio de Educación y Ciencia financia esta iniciativa a través del programa HPCI.
Sobre el nuevo superdenador
Fujitsu aplicará su tecnología central FUJITSU-MONAKA, basada en procesos de dos nanómetros y empaquetado tridimensional. La microarquitectura y los circuitos de voltaje ultrabajo buscan mejorar el rendimiento y la eficiencia. El sucesor FUJITSU-MONAKA-X integrará aceleración de IA y se adaptará a GPU y otros aceleradores. Este diseño permitirá soportar cargas de trabajo, desde informática periférica hasta centros de datos.
La propuesta busca dar flexibilidad a investigadores y empresas en el uso de recursos especializados. La integración de IA responde al aumento de proyectos que combinan simulación y aprendizaje automático. El desarrollo sienta las bases para unidades de procesamiento neuronal de próxima generación en Fujitsu. Fujitsu aplicará asociaciones con proveedores de GPU para asegurar compatibilidad y manejo de cargas heterogéneas. El diseño modular permitirá actualizaciones de hardware sin interrumpir operaciones críticas.
Impacto y cronograma
El proyecto FugakuNEXT refuerza la estrategia de Japón para impulsar la innovación científica y el desarrollo tecnológico. La plataforma aspira a atender demandas en salud, energía, medio ambiente y otros sectores estratégicos. Se prevé que los usuarios puedan ejecutar simulaciones complejas y modelos de inteligencia artificial a gran escala. Esta iniciativa busca sostener el liderazgo de Japón y generar infraestructura de referencia mundial en supercomputación. El sistema incorpora prácticas para reducir el consumo energético y apoyar los objetivos de sostenibilidad. El proyecto generará datos clave para mejorar la competitividad de la industria nacional.
La fase de diseño básico abarca entregables hasta el 27 de febrero de 2026 y marca el calendario de implementación. La fase subsiguiente definirá pruebas de rendimiento y validación del sistema antes de su puesta en marcha. Se establecerán informes trimestrales para evaluar avances y ajustar el cronograma según resultados. La supervisión conjunta de RIKEN y Fujitsu garantizará cumplimiento de plazos y objetivos.