La principal novedad es que la IA se aplica directamente sobre los datos, sin necesidad de trasladarlos a otros sistemas. Esto permite a las organizaciones combinar información privada con datos públicos para ejecutar procesos de análisis y automatización. Oracle asegura que este enfoque simplifica la adopción de la inteligencia artificial y reduce riesgos en el manejo de la información.
AI Database 26ai sustituye a la versión 23ai y se ofrece con soporte a largo plazo. La actualización se puede aplicar de manera inmediata, sin recertificar aplicaciones, y las funciones avanzadas de IA, como la búsqueda vectorial, se incluyen sin coste adicional.
Seguridad frente a nuevas amenazas
La nueva versión incorpora cifrado resistente a la computación cuántica, aprobado por el NIST, tanto para datos en reposo como en tránsito. El objetivo es evitar que información sensible pueda ser recopilada hoy y descifrada en el futuro mediante ordenadores cuánticos. Oracle destaca que su propuesta integra esta protección en todas las capas, algo que no ocurre en otros proveedores.
Además, el sistema refuerza la privacidad de los datos mediante controles específicos a nivel de fila, columna o celda, junto con el enmascaramiento dinámico de información no autorizada.
Un entorno para empresas y desarrolladores
AI Database 26ai también introduce mejoras orientadas a la creación de aplicaciones. Entre ellas, un contenedor de servicios privados de IA, que permite a las organizaciones desplegar sus propios modelos sin exponer datos a terceros. Asimismo, incluye una plataforma visual sin código para diseñar agentes de IA que automatizan tareas y un generador de aplicaciones APEX AI, que utiliza lenguaje natural.
En el plano de la infraestructura, Oracle mantiene Exadata como base para acelerar la IA a gran escala. También añade un servicio de protección contra pérdida de datos y ransomware, así como una base de datos distribuida globalmente que asegura continuidad y soberanía de la información