Se avecina una carrera frenética de compañías de todos los sectores para hacer frente a una realidad que muchos aún no quieren ver: el cambio climático. Los últimos meses han sido especialmente claves a la hora de ponerse en marcha, con planes medioambientales reales que están empezando a dejar constar un verdadero compromiso para intentar reducir las emisiones al planeta.
La propuesta de legislación de la UE ‘Fit for 55’ lanzada formalmente el pasado mes de julio sobre el clima, permitiría una reducción del 55% en emisiones perjudiciales para el medio ambiente. El nuevo paquete climático de la UE tiene varios cientos de páginas, pero en este artículo nos centraremos en todo lo que atañe al sector de los centros de datos.
La Comisión Europea propone modificar la fiscalización del petróleo, el gas, la gasolina y la electricidad, que hoy todavía favorece a los combustibles fósiles. Para los usuarios de gas, gasolina y petróleo, esa medida podría salir cara, mientras la electricidad, que se usa masivamente para la electromovilidad, podría abaratarse. Por tanto, pone de manifiesto la necesidad de una construcción de centros de datos más ecológica. Billy Durie, director del sector global de centros de datos en Aggreko, explicó que “el endurecimiento de las regulaciones de la UE tendrá importantes repercusiones en el ámbito del CPD. Si bien reducir la energía consumida por los centros de datos durante su operativa diaria será clave para cumplir los objetivos de emisiones, no hay que olvidar que minimizar el impacto de la construcción del centro de datos será la otra mitad de la batalla”.
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