La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha firmado el contrato de adjudicación del suministro de un nuevo superordenador que le permitirá, entre otros objetivos, mejorar la predicción meteorológica, tanto en su alcance temporal como en su precisión geográfica, y presentar dichas predicciones en términos probabilísticos. El proveedor elegido para emprender este camino es Bull, ganador de una adjudicación por concurso, por un montante de 3,48 millones de euros.
Este superodenador ofrecerá una potencia final de hasta 168 Teraflops, setenta y cinco veces más que el superordenador Cray al que sustituirá. Además, permitirá a AEMET abordar nuevos proyectos y actualizar los servicios actuales. Destaca la mejora sustancial de las predicciones meteorológicas mediante la implementación de sucesivos sistemas de predicción numérica del tiempo, deterministas y probabilísticos, capaces de resolver escalas horizontales en un rango de entre 1 y 3 kilómetros. Estos modelos servirán también para mejorar la predicción de fenómenos severos, integrando la información meteorológica disponible.
Pero además el superordenador reforzará y ampliará los actuales trabajos de AEMET en diferentes ámbitos como el cambio climático o la predicción de oleaje y la colaboración con organismos internacionales. Con todo ello, la AEMET podrá poner en marcha nuevos servicios de predicción marítima y medioambiental, y de vigilancia hidrometeorológica.
El nuevo sistema de supercomputación estará formado por 338 nodos, con elevada potencia y rendimiento, lo que le situará dentro de los 500 sistemas más potentes de mundo y el tercero de España. Además, este nuevo superordenador cuenta con una tecnología patentada por Bull que permitirá un ahorro en el consumo energético entre un 20 y un 40 por ciento respecto a los sistemas de refrigeración por aire o por agua fría; el actual enfriará con agua a temperatura ambiente.
El contrato contempla además la instalación de redes de alta velocidad y un sistema de almacenamiento de 360 Terabytes de Netapp junto a diferentes desarrollos ad hoc, el soporte a la migración de las aplicaciones desde Unix a Linux y la puesta en operación de las nuevas herramientas software.
